Además, dentro de este proceso de recuperación, una manifestación cultural profundamente arraigada en nuestra zona segoviana. El baile de jotas, que ha sido desde siempre parte fundamental de nuestras fiestas y encuentros, está siendo nuevamente practicado y transmitido a las nuevas generaciones, con el fin de preservar esta hermosa tradición.
El esfuerzo de nuestra comunidad por recuperar las tradiciones es un reflejo del profundo compromiso por preservar la identidad cultural de nuestro pueblo. A la vez, fomentamos la participación en actividades que fortalecen el sentido de pertenencia y el trabajo en conjunto. Un ejemplo de ello es la colaboración de nuestra profesora Puri, que junto a Lucy de Vallelado nos trajo la música de las Jotas. Gracias a ellas, tuvimos la oportunidad de aprender y practicar durante varios días, lo que hoy, en la celebración de la Natividad de la Virgen María, la festividad más importante de nuestro pueblo ha dado sus frutos.
Durante la procesión, hemos sido testigos de una participación increíble: más de 100 mujeres y hombres, unidos en el baile de las Jotas, algo verdaderamente notable en un pueblo tan pequeño como el nuestro. Ha sido un largo proceso de preparación, pero el entusiasmo y la alegría que hemos vivido lo han hecho inolvidable.
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